No, si la verdad es que después de arrancar la mañana pidiendo a treinta (29 en realidad, el número era estimativo pero ya me hinché las pelotas) educandos, el futuro del país, la luz que nos guiará a un futuro mejor, que saquen de lo profundo de sus mochilas una fotocopia que les dejara el viernes pasado, de UNA hoja, y que de los 29 sólo 4 la tengan;
Después de saber que el martes próximo elegiremos al Maestro del Año, para que alguien se gane una notebook y salude al gobierno nacional y popular de Vicente Barrio, se saque la foto y cantemos Gloria y Loor, al padre del aula, la Sarmiento inmortal;
Después de desayunar con un café Dolca porque se acabó el de cafetera, y de que durante la mañana y la tarde me llamen pidiendo por favor que no aparezca a reuniones que pedí porque me pidieron que las pida, y que nadie llame a quien tenían que llamar, léase a quien nos quiere sacar de su local;
Después de recorrer todo el Carrefour buscando una cortina de baño para poder cambiar ese pedazo todo roto y enmohecido y no encontrarlo hasta casi irme, de gastar casi 200 pesos en tres bolsas de NADA, y de darme cuenta que el 20% de ese gasto va a parar a mi cabeza, donde no hay tanto cabello que justifique semejante erogación, y también de revisar que de mis últimas 3 compras en el súper, el 90% de los importes fueron comprando escabio;
Después de recorrer un Shopping y recibir una inyección de realidad, que consistió en ver que las llamadas liquidaciones son 4 ó 5 productos con precios inflados y rebajados casi en idéntica proporción, y además a precios inaccesibles para alguien con un trabajo honesto;
Después de caer en la consideración de que me faltan millones de libros por leer, pero ni aún en los más premiados y renombrados y muertos y hábilmente inflados novelistas de Alfaguara y Tusquets encontré una puta historia que me atrapase como para siquiera poner bajo la lectora el código de barras como para evaluar la compra;
Después de malinterpretar la pregunta de un cachivache con los pelos de Lion-O y los modales de Gatúbela, y recibir un “lavado de cabeza” que se excedió en cuidados y atenciones demasiado cerca de mis orejas y mi nuca, if you mean what I say, por lo que estuve a punto de perder mis escasos rasgos de urbanidad y acometer a mamporros al impresentable de marras, y superado este lapso harto desagradable, comprobar que, por más milagros que haga el gay de pelo de indio y sus tijeras de desmecha, lo que Natura non da Capilatis non presta;
Después de comer a las apuradas unas empanadas y tratar de bajarlas con un resto de Coca-Cola del lunes y que, efectivamente, no alcance, y de caer en el detalle de que no había guardado en la heladera los porrones de Zillertal que como un opa compré en la línea de cajas del súper;
Después de intentar entrar el coche y no poder abrir la maltratada puerta del garage, que como es compartido, exime a todos de responder por cualquier desgracias (y ni hablar de si, realmente, nadie tuvo nada que ver y fuimos víctimas de una tentativa de robo), y da derecho a los consultados de sentirse atacados mientras el único que se jode es uno;
Después de todo eso, decía, lo único que me falta es no poderme dormir, que a las 7 hay que arrancar.
Son las 3.
XQSI XQNO - Versión 2025
Hace 1 mes