viernes, 5 de febrero de 2010

Parece mentira las cosas que veo, por las calles de...

La primera escena es de hace un par de meses; siempre doy unas vueltas por el pueblo antes de irme a dormir, para ver si sigue todo igual (igual de chico, igual de bien, igual de mal). Y claro, recorro ciertos lugares puntuales, esperando ver quién sabe qué. En una de esas tantas vueltas del perro que se muerde la cola, entre su casa y un nuevo café con nombre de figura poética, los veo (a ella y a su novio) caminando con un desgano digno de mejor causa, hacia el café, para hacer algo, vio?
La segunda escena, es del lunes pasado, cuando, sin escuchar, pude reproducir en mi mente el cuadro, sin temor a equivocarme: ella señalando el auto, él cargando las bolsas de la verdulería, ambos con cara de no querer estar en ese lugar. “Ahí, ahí está, poné las cosas en el baúl, haceme el favor, dale, apurate”.
¿Será que simplemente soy un tipo con suerte, que no ha caído en las garras del desenamoramiento y la rutina, o soy tan pero tan ingenuo (sepan perdonar mi liviandad para juzgarme, donde dice “ingenuo” coloquen “estúpido”) que sigo creyendo que esas cosas a mí no me van a pasar?
De momento, debo decir que bastante bien las estoy evitando. Claro que al precio de no tener quién me pregunte qué hago escribiendo a las 3 de la mañana, si no tengo sueño, si no pienso dormir, porque mañana hay que hacer un montón de cosas, hay que hacer el pedido en la verdulería, sabés que no me gusta hacer sola las compras, claro, porque como yo sola, la sandía entonces traétela vos, y a la noche vamos hasta oxímoron, que no me sacás nunca a ningún lado…
Cuán fácil es mi vida…

4 comentarios:

  1. Lean, esto es de tu pluma? o son rejuntes?

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  2. La mayoría (salvo los indicados) me pertenece. Vio, don, que lo mío no es solamente no-ver Lost?

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  3. AH! esto es lo que haces mientras el resto del planeta mira la serie Perdidos!!!
    No, bolas, en serio... esta bueno...

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  4. Desamor, feroz desamor, dijo el Nano.

    Profesor, siga escribiendo a las tres de la mañana, es mejor que dormir sin ganas.

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